Las casas colgadas de Cuenca

En la Comunidad Autónoma de Castilla La Mancha, España, sobre un cerro enmarcado entre los ríos Júcar y Huécar, se levanta la sorprendente ciudad antigua de Cuenca.

Una buena oferta hotelera permite encontrar alojamiento acomodado a todos los bolsillos, pero si se me admite un consejo, conviene hospedarse en la ciudad nueva, ya que los precios son mejores y de todos modos el centro viejo es muy accesible desde allí.

También es interesante la oferta gastronómica, aunque si de experiencias se trata, vale la pena elegir algunos de los establecimientos que se encuentran sobre la Plaza Mayor, entre el Ayuntamiento, el Convento de las Petras y la Catedral, sobre todo por lo pintoresco del entorno.


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De arraigada tradición religiosa, cuenta con iglesias, conventos y monasterios muy interesantes para visitar, como las iglesias de San Miguel, San Andrés, San Nicolás y San Pedro, los conventos de San Pablo, La Merced, Las Petras y Las Angélicas, y los monasterios de los Franciscanos Descalzos y de las Madres Benedictinas, entre otros.

Otro aspecto característico de esta ciudad es la profusión de museos que pueden visitarse, de distintas temáticas y para los más variados intereses. Desde el Museo de Cuenca, el Museo de las Ciencias de Castilla La Mancha, el de Arte Abstracto Español, el Ars Natura, pasando por los religiosos, Tesoro Cardenalicio y Museo Diocesano de Arte Religioso, hasta el muy específico Museo de Electrografía, ligado a la Universidad de Castilla-La Mancha, que muestra una colección de más de 4000 obras de arte electrográfico y digital de última tecnología.

Un paseo imperdible, es la visita a las casas colgadas de Cuenca. En mi experiencia personal, la mejor forma de abordarlas es caminando por la ribera Sur del río Huécar hasta el Puente de Hierro, construido sobre las ruinas del Puente de San Pablo, del Siglo XVI y reemplazado por la actual estructura de hierro. Se trata de un puente peatonal desde el cual se obtienen las mejores vistas no sólo del río, sino, y muy especialmente, de las Casas Colgadas, el monumento más característico de la ciudad.

Se trata de un conjunto de viviendas edificadas directamente sobre la barranca que forma la ribera Norte del Huécar, que datan del Siglo XV. En la actualidad existen tres casas, dos de las cuales (Las Casas del Rey) albergan el Museo de Arte Abstracto Español, mientras que en la otra (La Casa de la Sirena), hay un mesón.
Ingresar desde ese punto a la ciudad antigua nos permitirá, además, disfrutar de las fabulosas vistas panorámicas que ofrecen sus más de 1000 metros de altitud.

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